PRÓLOGO: SEMANA 11: "Aceptación"
Sara y yo nos fuimos a Irlanda a realizar este nuevo sentimiento para el proyecto de 52 semanas "Sentimientos emocionales" y también el último del prólogo.
Aprovechamos para dar forma a la aceptación, muy pronto os iré contando como ha sido toda esta experiencia y mis recomendaciones para viajar a Irlanda :D estoy preparando todo con mucho cariño por lo que os dejaré los post con los vlogs por aquí.
Quizás os esté desconcertando el que este sea el sentimiento de la aceptación. En el video quizás se entienda mucho mejor.
Y es que me he basado en la idea del duelo cuando sabes que vas a morir y debes pasar diferentes fases para aceptarlo. Documentándome he encontrado el modelo Kübler-Ross de la psiquiatra suizo-estadounidense Elisabeth Kübler-Ross que explica las 5 etapas del duelo, la negación, la ira, la negociación, la depresión y por último la aceptación. Estas etapas no tienen que ir en este orden pero en todo caso la aceptación es el último de ellos, en el que te resignas a tu devenir y en paz decides cual será tu final, en este caso ella no quiere dejarse llevar por la enfermedad que dará paso a su muerte y pone fin a su sufrimiento una vez que ha aceptado su destino. El médico de la peste negra es una alegoría, mostrando su cara oculta que la ha llevado a no querer sufrir ese fatídico final agonizante de su enfermedad poniendo final a su vida con su propia decisión.
Los médicos de la peste siempre han captado mi atención, en los siglos XVII y XVII eran contratados en los pueblos para tratar las epidemias, cuidaban a todos los ciudadanos de sus enfermedades casi siempre mortales. En ocasiones eran estudiantes practicando y no siempre eran médicos con estudios.
Utilizaban unas curiosas máscaras que los diferenciaban, con un pico alargado de medio pie de longitud, parecían aves, a mi personalmente me recuerdan a los cuervos y ese mismo pico lo rellenaban de perfume o hierbas aromáticas de esta forma se protegían del aire pútrido que rodeaba a los enfermos. También se decía que la longitud del pico marcaba la distancia con la enfermedad para evitar contagios.
Volviendo al tema que nos compete, no quería ver el duelo desde la muerte de un ser querido si no desde la propia muerte y como la aceptamos. En esas cinco fases sufrimos la negación, donde no aceptamos ese final inminente, es una defensa mental para no caer en el abismo del pensamiento de todo lo que se deja atrás.
La Ira es otra de las fases del duelo, donde la envidia por los que seguirán con vida comienza a carcomer el corazón dando paso a una oscuridad llena de implacable mal humor y un resentimiento exacerbado.
También intentaremos negociar con el destino, un dios, una creencia o los seres que te rodean, pides más tiempo sin perder la esperanza de que algo pueda cambiar. El tiempo... eso que no se puede comprar.
Llegamos a los últimos momentos donde la depresión se adueña del alma, nos volvemos irascibles, silenciosos, almas tristes y moribundas buscando un resquicio de tiempo dentro de un corazón sombrío.
Por último llegamos a la aceptación. El final sin solución, el enigma sin respuesta que da paz al alma y el fin de la lucha, en soledad recuerdas los tiempos vividos que ya no volverán.
Cada persona vive todo esto de una forma personal y quería dar mi propia visión como mera espectadora siempre desde el respeto a las personas que lo están viviendo.
Espero que os guste mi punto de vista y las fotos que os dejo a continuación, las realizamos en Rock of Cashel, un lugar que quería visitar desde hacía muchísimo tiempo.