Lección 6 UCDM

LECCIÓN 6

Estoy disgustado porque veo algo que no está ahí.

1. Los ejercicios que se han de llevar acabo con esta idea son muy similares a los anteriores.

*Es necesario, una vez más, que para cualquier aplicación de la idea de hoy nombres muy concretamente la forma de disgusto de que se trate (ira, miedo, preocupación, depresión, etc.) así como lo que percibes como su causa.

* Por ejemplo:

* Estoy enfadado con ______ porque veo algo que no está ahí.

* Estoy preocupado acerca de _____ porque veo algo que no está ahí.

2. Conviene aplicar la idea de hoy a cualquier cosa que parezca disgustarte, y puede usarse provechosamente durante el transcurso del día con ese propósito.

* No obstante, las tres o cuatro sesiones de práctica que hoy se requieren deben ir precedidas, como en días pasados, por un minuto más o menos de búsqueda mental, seguido de la aplicación de la idea a cada pensamiento de disgusto descubierto en dicha búsqueda.

3. Una vez más, si te resistes a aplicar la idea a algunos de los pensamientos que te causan disgusto más que a otros, recuerda las dos advertencias mencionadas en la lección anterior:

* No hay disgustos pequeños.

* Todos perturban mi paz mental por igual.

* Y:

* No puedo conservar esta forma de disgusto y al mismo tiempo desprenderme de las demás.

* Para los efectos de estos ejercicios, pues, las consideraré a todas como si fuesen iguales.

Ejercicio: Tres o cuatro veces, de un minuto aproximadamente.

Consejo: La lección habla como si deberías buscar en tu mente durante un minuto, y luego aplicar la lección a cada pensamiento descubierto en tu búsqueda. Sin embargo, puedes tener dificultad en recordar todas las cosas descubiertas. Si es así, en lugar de practicar en estas dos fases distintas, puede que quieras hacer la práctica de un modo ligeramente diferente: Busca en tu mente, encuentra un disgusto, aplícale la idea; luego busca de nuevo otra ofensa, aplícale la idea; y así sucesivamente.

Respuesta a la tentación: Voluntaria.

La idea puede usarse durante el día para eliminar tus disgustos. Pero esto no es un substituto de tus periodos de práctica.

Comentario UCDM

Esto empieza a explicar por qué estoy disgustado realmente. Nunca estoy disgustado por la razón que creo, estoy disgustado porque veo algo que no está ahí. (De nuevo el Libro de Ejercicios construye su caso pieza a pieza, no nos dice simplemente lo que estamos viendo, sólo que es algo que no está ahí. Si eres curioso échale una mirada rápida a la siguiente lección). No podemos ni siquiera imaginar cuánto de lo que vemos, cosas que pensamos que son “reales” y “hechos”, realmente son cosas que no están ahí. El argumento que se está construyendo aquí es que todo nuestro disgusto procede de cosas que no están ahí. Sólo lo que Dios crea es real, y nada de lo que Él crea es doloroso, y si éstos son hechos, la idea de hoy tiene que ser verdad. Así que cuando me siento disgustado, puedo decirme a mí mismo: “Estoy disgustado porque veo algo que no está ahí”.

Se nos pide recordar “las dos instrucciones mencionadas en la lección anterior” (3:1). Puesto que estas dos instrucciones se repiten de nuevo, está claro que son importantes, así que pensemos en ellas un poco. La primera de ellas:

No hay disgustos pequeños. Todos perturban mi paz mental por igual.

(3:2-3)

Me doy cuenta de que tengo que recordarme esto a mí mismo un montón de veces. Es tan fácil pasar por alto lo que a mí me parecen disgustos pequeños, y dejarlos sin solucionar. Una ira muy violenta contra alguien que me traiciona y me roba el trabajo no es mayor que lo que yo pienso que es una pequeña molestia por un servicio lento en un restaurante. Ambos tienen el poder de perturbar mi paz mental. Si mi meta es una mente en paz, tengo que aprender a tratar con todos mis disgustos como de igual importancia, tengo que aprender a “reconocer lo que es lo mismo y lo que es diferente” (L.4.3:4).

No puedo conservar esta forma de disgusto y al mismo tiempo

desprenderme de las demás. Para los efectos de estos ejercicios, pues,

las consideraré a todas como si fuesen iguales. “(6:3-4)"

Al menos durante los períodos de práctica, necesitamos considerar a todos los disgustos como iguales, y aplicar la lección a todos ellos. Si continúo sin aplicar la lección a los disgustos “menores” o a un disgusto que me parece justificado, no dejaré que estos disgustos desaparezcan. Me estaré aferrando al principio detrás de todos ellos. Sería como decir que vas a perder peso eliminando el azúcar y la grasa de tus comidas pero tomando dos kilos de helado cada noche. El Curso insiste en que seamos minuciosos y totales en nuestras prácticas.

“Estoy disgustado porque veo algo que no está ahí”.………

Esta lección puede resultarnos difícil a la hora de su aplicación, ya que tenemos la tendencia de responder con una emoción ante este tipo de situaciones. Cuando vivimos una separación amorosa por ejemplo podemos sentir que una tristeza o rabia tan profunda que será muy difícil deshacernos de ella durante un tiempo.

En esta interpretación debemos prestar atención a dos aspectos:

La interpretación que hacemos de la acción es erronea puesto que nos basamos en un juicio, viviendo la experencia desde los ojos de una víctima sin tener nada que ver con lo sucedido. El ego interpreta esto como hacia afuera “la culpa siempre está en el otro” sin tener en cuenta que ese otro es su propio espejo y mejor maestro.

También tenemos que considerar la emoción negativa que nos ancla al pasado condicionando nuestras percepciones por todo lo vivido.

Con esta lección transmutaremos estas emociones ancladas en el pasado para vivir en el presente donde podemos encontrar la verdad desde el perdón.

De esta forma crecemos tomando conciencia de que podemos elegir y ser los creadores de nuestra vida para sembrar una vida mejor y recojer la cosecha.

Os dejo este video de Enric Corbera para entender esta lección más en profundidad: